6 consejos para ajustar sus finanzas después de las vacaciones
Las vacaciones responden a la necesidad de descanso de toda persona. Estos días buscan la relajación, así como salir de la rutina y olvidarse de las presiones que pueden provocar el trabajo o estudio.
Aunque muchos deciden disfrutar de la paz y la comodidad del hogar, otras personas prefieren invertir parte de su presupuesto en un viaje que les permita desconectarse de todo.
Salir de paseo puede repercutir en las finanzas, pero ¡tranquilo! Para conseguir una estabilidad financiera después de disfrutar unas merecidas vacaciones, tome nota de las siguientes recomendaciones.
Revise su salud financiera y optimice sus gastos
Es fundamental observar el estado actual de los ingresos, ahorros y gastos, con el fin de evaluar cuáles consumos son imprescindibles, cuáles se pueden reducir y cuáles se deben eliminar.
Tome en cuenta que, para tener una buena salud financiera, lo más importante es saber gestionar el gasto, más allá de cuánto se gana.
Algunas acciones sencillas que pueden realizar para racionalizar los gastos es hacer las compras del supermercado con una lista o dejar las salidas de compras para ocasiones especiales, aprovechar los eventos gratuitos, ahorrar para determinadas necesidades y evitar los gastos hormigas, como las golosinas después del almuerzo .
Recuerde los gastos presentes y futuros
Si bien pasará algunos días vacacionando fuera del hogar, tenga presente que algunos gastos se mantienen; por ejemplo, se sigue emitiendo la factura por el servicio de electricidad, agua, teléfono, cable o alquiler, entre otros. Estas son deudas que deben contemplar y cancelar sin excepción.
Fondo para imprevistos
Las emergencias surgen en cualquier momento y, si todos sus ahorros fueron destinados a las vacaciones, es probable que no pueda resolver económicamente esa necesidad imprevista.
Por ello, es importante tener un fondo extra, exclusivo para emergencias, que le permita hacer frente a este tipo de situaciones inesperadas, de forma que nunca tenga que recurrir al presupuesto de los próximos meses.
Paralelo a este ahorro, puede ir guardando algún dinero para sus próximas vacaciones. Es determinante establecer un presupuesto detallado, desde los gastos de transporte, hotel, alimentación y ocio; la meta es acercarse lo más posible al monto requerido.
Cancelar deudas
Si durante las vacaciones incurrió en el uso de tarjetas de crédito o en un préstamo personal, es recomendable establecer un plazo corto para cancelar estas deudas y evitar que lleguen sus próximos días de descanso endeudado.
Mientras se recupera, se sugiere pagar las compras con efectivo o tarjeta de débito, esto le facilitará llevar a cabo un control y dar seguimiento a todos los gastos. Por lo que, idealmente, debe evitar el uso de tarjetas de crédito por un tiempo para no aumentar la deuda.
Convierta a la tecnología en su aliada
En la actualidad existen diversas aplicaciones que le pueden ayudar a tener una mayor claridad de sus gastos y de las metas alcanzables.
Estas herramientas digitales le permiten realizar acciones como registrar sus gastos o inversiones de manera rápida, organizada y por categoría; por ejemplo, comida, transporte, entretenimiento, estudios, ahorro, etc.
También puede incluir ingresos y egresos diarios, así como definir presupuestos y metas financieras, y dar seguimiento a las mismas.
Algunas de estas aplicaciones, incluso, realizan informes mensuales con gráficos y estadísticas fáciles de comprender para que pueda comparar el comportamiento de sus movimientos financieros.
Entre muchas otras funciones, también están los recordatorios de pagos y el almacenamiento de fotos de facturas o recibos.
Nuevos ingresos
Si, a pesar de estos esfuerzos para encontrar un equilibrio financiero, aún tiene algunas dificultades para afrontar los gastos, contemple la idea de generar dinero con algún trabajo extra o emprendimiento en su tiempo libre. Evite pedir prestado, porque sería endeudarse más.
Las vacaciones dentro y fuera del hogar suponen un momento satisfactorio en el plano personal, siempre y cuando se realice una planificación tanto de las actividades como de los gastos en que se van a incurrir.
Es normal que durante estos días de descanso los gastos aumenten y que se pueda salir un poco del presupuesto establecido, por lo que realizar una proyección económica -previa y posterior a las vacaciones- es vital para mantener una salud financiera personal y familiar.
